Con la crisis actual, la eficiencia energética es un tema que cada vez nos preocupa más. De ahí que esté surgiendo en el sector una tendencia en la rehabilitación de nuestros inmuebles. Y es que, existen múltiples herramientas para conseguir un mayor aprovechamiento de la energía solar y lograr un mejor mantenimiento del calor a través de pequeñas reformas. Colocar placas SATE (Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior) puede ayudarte a alcanzar esos objetivos. En GTI Zaragoza te contamos todo lo que debes saber sobre este revestimiento.
El SATE es un aislamiento térmico que se coloca en el exterior del edificio y que se suministra como conjunto, de tal forma que todos sus componentes deben ensamblarse y funcionar juntos. Si bien se presenta como una novedad (hasta ahora no se habían desarrollado normativas para su puesta en obra), en los años 40 en Centroeuropa ya comenzó a utilizarse.
Cuando está correctamente instalado permite resolver de manera sencilla la mayoría de los puentes térmicos de la vivienda, zonas débiles de aislamiento por las que se escapa el calor en invierno y el aire frío en verano, haciéndonos usar más energía de la necesaria. Por tanto, su colocación garantiza un menor consumo de energía (el ahorro puede ser de hasta un 45%) y ayuda a tener un eco-balance positivo.
Para instalarlo, el panel aislante se coloca en un muro con un adhesivo y una fijación mecánica. A su vez, este se protege con un revestimiento construido por una o varias capas de mortero, una de las cuales lleva una malla de refuerzo. Es importante respetar todos estos pasos, ya que solo de esta forma se asegurará el mejor resultado. Además, en comparación con otros aislamientos, no disminuye el espacio habitable, no causa molestias a los inquilinos, revaloriza el edificio, protege su estructura y es impermeable a la lluvia.
Aunque sin conocer el inmueble es imposible ofrecer una cifra exacta, los precios de SATE, que pueden reducirse o aumentarse según la tipología del edificio, varían entre los 60 y los 80 euros por metro cuadrado e incluyen mano de obra, materiales, andamios, medios auxiliares… Además, para facilitar su aplicación, las administraciones públicas están promoviendo planes de ayuda para poder reducir la factura final. No obstante, cabe recalcar en este punto la necesidad de realizar una aplicación por parte de una empresa homologada y especialista en este sistema, con el fin de evitar defectos que deriven en problemas futuros para la fachada.
Al dotar el edificio de una mayor inercia térmica, se reduce entre un 20% y un 70% la necesidad de utilizar calefacción o refrigeración, lo que supone un beneficio para la sostenibilidad y el medio ambiente, teniendo en cuenta que la mitad de los edificios de nuestros países están construidos con aislamiento deficiente o, en muchos casos, sin aislamiento.
En GTI Zaragoza (C/ de Felipe Sanclemente, 6) te asesoramos para comprar una vivienda que garantice la eficiencia energética. Te esperamos en nuestras oficinas para ayudarte, y si tienes cualquier duda, no dudes en consultarnos. Estaremos encantados de atenderte.
